martes, 24 de junio de 2014

Magdalena

Oh la la. C'est magnifique. 

"Ce pain est la nete de la planète", osea, este pan es la neta del planeta.
De la región de Lorena en Francia, señoras y señores démosle una calurosa bienvenida a la petite Madeleine: la Madalena.
La Madalena es pues un bizcocho de origen frances que viajó a España donde se afianzó en el gusto popular para mas tarde viajar hasta América donde fue muy bien recibida. Aunque se parecen, no se debe confundir con el panque, ni con la mantecada, ni mucho menos con el muffin o el cupcake, pues la Madalena tiene una receta especial a base de huevos, azúcar, mantequilla, harina de trigo, levadura, y aroma de limón obtenido generalmente de la cáscara. En la receta tradicional francesa, se baten las claras de huevo a punto de nieve para dar más ligereza a la masa. Es por lo tanto un panquecito extremadamente ligero.
Dice la tradición que se llama Madalena porque una  joven criada llamada Madeleine Paulmier, en 1755, elaboró estos panecillos para el rey de Polonia Stanislas Leszczyński, que tenía un palacio en Commercy al norte de Francia en la región de Lorena . Esta tradición es la más popular.
Otras fuentes remontan el origen de este panecillo a la época de los peregrinajes cristianos a Santiago de Compostela. Una joven llamada Magdalena les servía a los peregrinos unos pastelitos en forma de concha, símbolo de este peregrinaje. Las "magdalenas" se extendieron a lo largo de los caminos de Santiago, lo que explica su tradicional implantación en España, lo cual también explica porque en México la conocemos con ambos nombres: Madalenas y Magdalenas.
He notado que en México llamamos a este panecillo Madalena cuando tiene la forma de concha marina con sus estrías características, y la llamamos Magdalena cuando tiene una forma de loma achatada y va cubierta con nuez picada. 
La Magdalena es un pan muy popular en los cafés de chinos que hay por toda la ciudad de México por lo cual es fácil degustar uno de estos panes acompañado de un humeante café con leche.
Incluso la panificadora industrializada Bimbo tiene entre sus productos empaquetados unas Madalenas que en un rato de ocio no resultan ser tan malas como otros de sus productos.

Foto de madalenas de  http://lacusinedenenisq.blogspot.mx/
Esta es una Magdalena

martes, 17 de junio de 2014

Hueso

Para entender esta entrada se deberá ser mexican@. Solo un@ mexican@ será capaz de entender lo que implica para un@ mexican@ tener "hueso."
Si hay algo en este vasto mundo que todo mexicano desea más que cualquier otra cosa, es tener un hueso.
Los que no tenemos hueso solo podemos imaginarnos lo bonito sería tener uno, porque sabemos que los que lo tienen nunca jamas por ninguna circunstancia lo soltarán. Y lamentablemente no hay hueso pa´todos.
Pero hay que entender que está obsesión del mexciano por un hueso no es gratuita, sino que el hueso ha jugado un papel trascendental en la vida de los mexicanos.
El hueso fue la única herramienta, usada por el partido oficial, capaz de pacificar a un rabioso país que de otra forma seguiría en continua guerra y perpetuo magnicidio.
El hueso fue ese instrumento que nos sacó de una guerra civil sin cuartel a nuestra bendita institucionalidad actual, corrupta a mares, terriblemente ineficaz pero pacífica.
Por todo esto nunca hay que menospreciar al hueso, no señor, y mucho menos si se trata de un hueso de ¡Pan de Manteca!
Ese si, señoras y señores, es un señor hueso y no una triste secretaría de la función publica.
Con este hueso yo si que puedo ser feliz. Bueno, con este hueso y un vaso de chocolate frio.
Sopeado en chocolate frio es una cosa prodigiosa.
 A mi me fascina el hueso de pan de manteca pero también hay huesos de pan francés, pan fino y de hojaldre.
Aunque los panteones están lógicamente llenos de huesos aun no he visto que está pieza de pan sea usada durante la fiesta de día de muertos de alguna forma particular.
Se trata de una pieza de pan muy popular que es mencionada por Chava Flores en su maravillosa canción "La Chilindrina" (canción que pueden disfrutar en la sección de este enharinado blog dedicada a las canciones sobre pan.) Los huesos de pan de manteca afortunadamente aun hoy son muy comunes entre la gran variedad de pan dulce disponible en la mayoría de panaderías de la capital.  
Es mi deseo mas patriótico que los mexicanos dejemos de desear un "hueso" y podamos vislumbrar una vida mas allá del hueso. El hueso sirvió para pacificar al país, si , pero que también lo sumió en una sofocante pasividad terriblemente destructiva. Por eso mi deseo mas patriota es que el único hueso que anhelemos los mexicanos sea el de la merienda.
Este es un hueso.